La sostenibilidad es la prioridad empresarial más importante para muchas industrias en este momento, y por una buena razón. La necesidad de conservar recursos, encontrar soluciones más responsables con el medioambiente y reducir el impacto en el planeta nunca fue tan importante.
Los objetivos de reducir a la mitad las emisiones globales de carbono para 2030 y alcanzar el cero neto para 2050 son intrépidos. La operación de la sostenibilidad requiere cambios significativos, pero la rentabilidad para el medioambiente y la industria vale mucho la pena. Sin embargo, sin planes de ejecución sólidos y un sentido de urgencia, el mundo no logrará estos objetivos a tiempo.
Para las compañías, su viabilidad comercial futura depende de ofrecer resultados de sostenibilidad. Los consumidores, inversores y empleados están impulsando a las compañías hacia estos objetivos, y esta urgencia es la razón por la que los directores de sostenibilidad (CSO) también están consolidando su función como influenciadores clave de la compañía para la responsabilidad corporativa y la reputación. Los CSO están actuando rápido y aprenden a medida que avanzan. Moverse rápido es, por naturaleza, riesgoso, pero el mayor riesgo es no moverse lo suficientemente rápido o ser lo suficientemente inteligente. Aunque la velocidad es crítica, las compañías también deben equilibrar la inversión y la escalabilidad para garantizar el éxito continuo a medida que impulsan cambios a corto plazo que conduzcan hacia los objetivos del 2050.
Los CSO ocupan hoy un asiento más influyente en la mesa, con una enorme responsabilidad y presión para demostrar un progreso tangible mientras se cumplen los objetivos financieros. Como resultado, los CSO buscan estrategias de sostenibilidad programáticas y repetibles. Como cualquier inversión de tiempo o recursos, están tratando de encontrar las áreas donde pueden realizar las mejoras más valiosas y medibles para el largo recorrido.
Los CSO están actuando rápido y aprenden a medida que avanzan. Moverse rápido es, por naturaleza, riesgoso, pero el mayor riesgo es no moverse lo suficientemente rápido o ser lo suficientemente inteligente.
La sostenibilidad requiere transformación, que se filtra en cada función organizacional. Para impulsar cambios medibles, los CSO necesitan información y una comprensión profunda de cómo las diferentes iniciativas de sostenibilidad afectan a otras partes de la organización. La colaboración entre los líderes de operaciones, ingeniería y tecnología (y empoderar a los empleados para que contribuyan) es vital para identificar y actuar sobre las mejores oportunidades para el desempeño medioambiental. Los CSO deben basarse en la experiencia, los datos y los años de experiencia en operaciones de fabricación de la organización para descubrir ideas innovadoras que se traducen en soluciones reales que pueden comercializarse más rápido para apoyar los compromisos de sostenibilidad corporativos y globales.
Buscar y seleccionar los mejores lugares para iniciar una transición energética hacia un futuro con menos carbono es fundamental para el éxito. Cuatro áreas de oportunidad que los legisladores de todo el mundo y los ejecutivos de la industria más mencionan son: descarbonización de fuente de energía, gestión de emisiones, procesos de electrificación y eficiencia energética. Las pequeñas mejoras en cada una de estas áreas se vuelven significativas cuando se escalan en toda una empresa.
El crecimiento de las opciones de energía renovable como hidrógeno, solar, eólica, nuclear, hidroeléctrica y biocombustibles sigue ofreciendo nuevas oportunidades de descarbonización para reducir las emisiones. Las tecnologías digitales equipadas para gestionar estas fuentes de energía más responsables con el medioambiente pueden optimizar las operaciones, impulsando más eficiencias energéticas. Las organizaciones están explorando tecnologías para diversificar la mezcla de energía, como la conversión de desechos agrícolas o de vertedero en combustibles renovables para transporte o el exceso de electricidad en hidrógeno y la transformación de emisiones tóxicas como metano y dióxido de carbono en calefacción para edificios y combustible para transporte.
La fabricación industrial y la producción de energía son responsables de casi el 50 % de las emisiones de gases de efecto invernadero en el mundo y son la fuente número uno de calentamiento global. El software y las tecnologías de medición avanzadas pueden detectar, monitorizar y reducir fugas (conocidas como emisiones fugitivas), así como optimizar los procesos de combustión para reducir las emisiones conocidas.
Por ejemplo, un cliente de Emerson, Denka, registró una reducción del 7 % en la pérdida de vapor mediante el uso de sensores acústicos inteligentes y análisis para “escuchar” las fugas de vapor en toda su planta y guiar al personal para que solucione las fugas rápidamente.
Mientras que las tecnologías de gestión de emisiones proporcionan oportunidades inmediatas y escalables para tener un impacto significativo, las compañías pueden invertir en mejoras más transformadoras, como la tecnología de captura, utilización y almacenamiento de carbono (Carbon capture, utilization and storage, CCUS) para obtener ganancias a largo plazo.
El sector de energía se enfoca en las “tres D”: descarbonización, descentralización y transformación digital. Las tecnologías de automatización avanzadas permiten que se generen y compartan más fuentes de energía renovables (como la solar, eólica, hidroeléctrica, microrred y otros recursos energéticos distribuidos) en la red eléctrica. Los sistemas de gemelos digitales ayudan a los operadores a modelar dinámicamente modelos de producción de electricidad y optimizar el desempeño de la planta.
Existen tecnologías hoy en día que permiten que las centrales eléctricas virtuales cambien sin problemas entre fuentes de energía más grandes y más pequeñas para modelar, agregar, optimizar y enviar energía a la red en tiempo real. Esta interconectividad es crítica para proporcionar energía confiable de manera segura. Las soluciones de redes eléctricas sostenibles, alimentadas por análisis predictivos y prescriptivos integrales completos, proporcionan visibilidad operativa en tiempo real en todo el sistema de alimentación, lo que permite que los servicios generales optimicen la eficiencia energética e integren más fácilmente las energías renovables en la mezcla de energía.
Las soluciones de redes digitales de Emerson ayudan a TenneT, un operador europeo líder en sistemas de transmisión de electricidad que atiende a casi 42 millones de personas en los Países Bajos y Alemania, a equilibrar el suministro y la demanda de electricidad, al mismo tiempo que incorpora fuentes de energía más responsables con el medioambiente.
Las operaciones industriales consumen enormes cantidades de energía, haciendo que la eficiencia energética sea una de las oportunidades más críticas en el juego de herramientas de sostenibilidad medioambiental. La eficiencia energética no solo reduce los costos operativos y mejora la utilización de los recursos, sino que también mejora el desempeño de las emisiones. Buscar maneras de optimizar e impulsar una mayor eficiencia energética puede producir un impacto medible, con pequeños ajustes que suman grandes ganancias.
El resultado final: Cada vez será más necesario que los CSO demuestren un progreso real y medible. La reputación y el resultado final de sus compañías dependerán de ello.
Desde la optimización de los procesos de combustión de la planta, incluyendo la monitorización dinámica y el control de calderas, hornos y otros activos que consumen mucha energía, pasando por el modelado y la reducción del consumo de combustible, hasta la maximización del desempeño de combustible y oxígeno, las tecnologías de gestión de energía y el software como los sistemas de información de gestión de energía pueden mejorar significativamente las eficiencias energéticas, al mismo tiempo que reducen las emisiones.
Un ejemplo de ello es el fabricante de productos para el consumidor Colgate-Palmolive, que utiliza tecnologías de Emerson para reducir el uso de energía en sus instalaciones de embalaje de productos y ayudar a la compañía a alcanzar su objetivo de lograr cero emisiones de carbono netas en las operaciones para 2040. Con los datos de las avanzadas tecnologías de sensores y análisis de Emerson, Colgate ya ha registrado una reducción del 15 % en el uso de energía y espera ahorros más significativos a medida que la tecnología se amplíe.
El resultado final: Cada vez será más necesario que los CSO demuestren un progreso real y medible. La reputación y el resultado final de sus compañías dependerán de ello, especialmente a medida que los inversores institucionales hagan que el desempeño medioambiental, social y de gobernanza (ESG) sea un criterio clave para la inversión en una compañía, y los posibles empleados sopesen sus opciones de carreras profesionales.
Sin embargo, el éxito en la sostenibilidad no reside solo en la oficina de los CSO, es el trabajo de todos. Los CSO necesitan asociaciones, tanto interna como externamente. Necesitan ingeniería y operaciones para pivotar hacia nuevas métricas y ayudar a descubrir maneras de operar de manera más sostenible mientras protegen la rentabilidad de la compañía. Necesitan que los miembros del equipo de la cadena de suministro encuentren formas creativas de obtener materiales que mejoren sus métricas. Necesitan que los proveedores intervengan, se alineen y contribuyan.
Con estas colaboraciones, combinadas con tecnologías avanzadas, inversiones e innovaciones, los CSO estarán en camino para impulsar la verdadera descarbonización de una manera significativa. Solo entonces podemos seguir el camino para el ajuste del cero neto.
