El sensor de conductividad de contacto Rosemount 400, con cable integrado, permite medir con exactitud la conductividad electrolítica en una amplia variedad de aplicaciones que van desde agua de alta pureza hasta agua limpia de enfriamiento. El sensor de conductividad de contacto Rosemount 400 resulta ideal para usarse en líquidos limpios no corrosivos, que tienen una conductividad inferior a 20 000 µS/cm.