Los sistemas de monitorización de muestras de aire detectan humo, H 2S, H, CH 4, CO y otros muchos componentes en un amplio rango de aplicaciones
Los sistemas de aspiradores se usan para medir la concentración de los componentes específicos en una corriente de gas que fluye por el conducto mediante un instrumento externo. La monitorización de las emisiones de materiales peligrosos y la acción según las lecturas de muestra pueden mejorar las operaciones, garantizar la seguridad y ayudar en el cumplimiento normativo en diferentes aplicaciones como la generación de energía con turbinas de gas, plantas de tratamiento de aguas residuales y tanques de GNL o GLP.
Los aspiradores son instrumentos de recolección de muestras por aspiración de los sistemas de protección utilizados principalmente con fines de seguridad. La muestra que se mide se extrae bajo un vacío ajustable creado por un eductor impulsado por aire. Los caudales se controlan por medio de un integral needle value que indica la velocidad en un caudalímetro. La muestra se pasa a través del sensor y se agota, junto con el aire del instrumento, por medio del puerto de escape Si el aspirador está en un área “segura”, se recomienda dirigir el escape de nuevo al área de donde vino. Con la medición externa, se extrae una corriente de muestra del conducto y se envía a un analizador de instrumentos, montado remotamente a una distancia segura y lejos de la corriente de gas.
Los aspiradores de humo y gas se colocan fuera del área de muestras para mantener la exactitud que se puede ver afectada por las condiciones de temperatura y humedad dentro del conducto. Las sondas para conductos con autocompensación se pueden colocar en las áreas de muestras de aire, como en el conducto en la admisión o escape de aire. Un aspirador resuelve los problemas que enfrentan otros sistemas de muestras al extraer las muestras simultáneamente en todo el ancho del conducto para asegurar la captura de todos los componentes. Estas muestras están mezcladas para mantener las proporciones adecuadas con respecto a su verdadera distribución dentro del conducto
El personal de la planta que no puede monitorizar remotamente la presencia de gas tóxico o de combustible podría ingresar en áreas potencialmente peligrosas que dan lugar a condiciones de trabajo inseguras. Algunos ejemplos de las aplicaciones en donde los aspiradores serán útiles incluyen petróleo y gas, refinación de hidrocarburos, producción de energía, químicos, y aguas y aguas residuales. Los aspiradores se usan comúnmente para monitorizar el metano, hidrógeno, humo, sulfuro de hidrógeno, monóxido de carbono, dióxido de carbono y agotamiento de oxígeno en las corrientes de gas.
Los sistemas in situ son un método alternativo de monitorización para emisiones de materiales peligrosos en las corrientes de gas. Aunque las mediciones in situ ofrecen un tiempo de respuesta rápido, estos tipos de sistemas no funcionan bien cuando la corriente de gas está a una temperatura alta o es altamente corrosiva. En estos casos, el sensor puede ensuciarse o fallar completamente y hacer que la medición sea inválida. Esto puede ser especialmente problemático cuando el reemplazo del sensor requiere un periodo de inactividad en las aplicaciones en donde la operación ininterrumpida es esencial. Los instrumentos y analizadores in situ con frecuencia tienden a ser costosos debido al requisito de diseños con cierto nivel de protección contra la corriente de gas.
Documentación y recomendaciones de reemplazo para los productos analíticos y de detección descontinuados
